En Narval, somos expertos en logística frigorífica y comprendemos que la clave para garantizar la calidad y seguridad de los alimentos radica en mantener la temperatura adecuada durante todo el trayecto.
Pero ¿cuál es la temperatura perfecta para transportar alimentos? ¡Te lo explicamos!
Importancia de la temperatura en el transporte de alimentos
El control de la temperatura es esencial para prevenir el crecimiento de bacterias y preservar la frescura de los alimentos. Cada tipo de alimento tiene una temperatura ideal que debe mantenerse constante durante su transporte.
En Narval, sabemos que la temperatura perfecta varía según el tipo de producto. Alimentos como carnes, pescados, productos lácteos y frutas frescas tienen requisitos de temperatura específicos que debemos cumplir con precisión para mantener la cadena de frío.
Temperaturas recomendadas para los distintos tipos de alimentos
1. Productos congelados (-18°C o menos)
Los alimentos congelados, como carnes, pescados y vegetales, requieren mantenerse a -18°C o menos durante el transporte. Esta temperatura asegura que los productos se mantengan en estado de congelación profunda, lo que ralentiza el crecimiento de bacterias y mantiene intactas todas sus propiedades.
Cualquier aumento en la temperatura durante el transporte puede causar descongelación parcial y, si se vuelve a congelar, deteriorar la calidad del producto. Por ello, es fundamental un monitoreo constante para asegurarse de que los productos permanezcan a esta temperatura.
2. Productos refrigerados (entre 0°C y 4°C)
Los alimentos frescos, como lácteos, frutas, verduras y carnes refrigeradas, requieren temperaturas entre 0°C y 4°C para preservar su frescura. Mantener estos productos a la temperatura adecuada durante el transporte evita que se deterioren rápidamente o pierdan sus propiedades nutricionales.
Es importante destacar que la temperatura no debe bajar de 0°C para evitar la congelación de productos frescos que no están diseñados para ser congelados, como ciertas frutas y verduras, que pueden sufrir daños irreversibles en su textura y calidad.
3. Alimentos que no requieren refrigeración
No todos los alimentos requieren ser transportados en condiciones de refrigeración. Productos como cereales, conservas y algunos tipos de pan pueden ser transportados a temperatura ambiente, siempre y cuando se mantengan en un rango que no favorezca el crecimiento bacteriano, generalmente por debajo de los 25°C.
Consecuencias de un mal control de la temperatura
El incumplimiento de las temperaturas adecuadas puede tener graves consecuencias ya que las temperaturas incorrectas pueden propiciar el crecimiento de microorganismos patógenos, como la Salmonella o el Listeria, que pueden causar enfermedades graves si los productos contaminados son consumidos.
